Os casáis. Ese ha sido el primer bombazo con el que habéis sorprendido a propios y extraños. ¿Por qué no seguir haciéndolo también en el cómo lo comunicáis?
Podéis optar por una invitación tradicional (en cuanto al material, claro, que nosotros no entendemos de clasicismo en creatividad) o podéis buscar nuevas formas de decirles a todos los que os importan que habéis decidido oficializar vuestra relación por todo lo alto.
¿Habéis pensado en estampar vuestras invitaciones de boda sobre madera? La serigrafía es perfecta para esto y el resultado, ya lo veis. Como poco, sorprendente.
En este caso, fueron los novios quienes nos trajeron su propio diseño y nosotros nos encargamos de serigrafiarlo. Pero, si preferís que seamos nosotros quienes nos encarguemos también de la creatividad, todo es hablarlo.
¡Más madera, que nos vamos de bodorrio!